miércoles, 16 de julio de 2025

¿Cómo actuar frente a incendios causados por químicos?

 

Frente a incendios químicos, evacúe, evite el agua y use extintores específicos según el tipo de sustancia. Descubra cómo responder ante este riesgo.

Los incendios que se generan durante el empleo de productos químicos pueden ser extremadamente peligrosos y difíciles de controlar. Por ello, es fundamental contar con una preparación adecuada para prevenirlos y responder de manera eficaz cuando ocurren. 

En este artículo de Amoquímicos, ofrecemos una guía completa sobre cómo actuar frente a este tipo de emergencias, desde entender las características de estos incendios hasta las medidas de prevención y respuesta correcta. ¡Preste mucha atención!

Tipos de incendios

Los incendios no se limitan a un único tipo de fuego, sino que varían considerablemente según los materiales involucrados. Conozca algunos de los más comunes a continuación:

  • Clase A: incendios de materiales combustibles comunes

Se producen cuando materiales como madera, papel, telas, plásticos y algunos tipos de caucho arden. Aunque son comunes, en el contexto químico pueden involucrar productos derivados del plástico o textiles impregnados con sustancias químicas inflamables. La combustión de estos materiales genera calor y humo, pero también libera compuestos orgánicos volátiles que pueden complicar el control del fuego. Para su extinción, se utilizan principalmente métodos de extinción con agua o espuma.

  • Clase B: incendios de líquidos inflamables y combustibles

Son causados por líquidos como aceites, gasolina, solventes y alcoholes. Estos líquidos son altamente volátiles y, en muchas ocasiones, su combustión puede generar grandes llamas y nubes de humo tóxico. En el caso de sustancias químicas como la acetona o el metanol, la reacción es aún más peligrosa debido a su alta tasa de vaporización. Estos incendios requieren agentes de extinción como espumas, polvo químico seco o CO₂, ya que el agua puede empeorar la situación al propagar el líquido inflamable.

  • Clase C: incendios en equipos eléctricos energizados

Se generan por equipos eléctricos, como cables, circuitos, generadores, paneles eléctricos y maquinaria que está en funcionamiento. En estos incendios, el uso de agua no está permitido, puesto que puede provocar descargas eléctricas peligrosas. La extinción debe realizarse con agentes no conductores como CO₂, polvo seco o espuma especial para evitar la electroconductividad, además de cortar el suministro eléctrico siempre que sea posible.

  • Clase D: incendios de metales combustibles

Esta clase de incendio involucra metales como magnesio, sodio, potasio, aluminio y litio, que son muy reactivos y pueden incendiarse a temperaturas extremadamente altas. Los incendios de clase D son especialmente peligrosos porque los metales involucrados reaccionan violentamente con el agua, liberando hidrógeno inflamable y aumentando la intensidad del fuego. Para controlar este tipo de incendio, se requieren extintores especiales con polvo seco o arena, ya que los agentes convencionales como agua o espuma no son efectivos y pueden empeorar la situación.

  • Clase K: incendios por aceites y grasas de cocina

Surgen en entornos de cocina, especialmente en equipos industriales como freidoras, sartenes y sistemas de cocina comerciales, cuando aceites o grasas alcanzan temperaturas excesivas y se incendian. Estos fuegos pueden ser difíciles de controlar debido a la alta temperatura a la que arden los aceites y la facilidad con la que se propagan. El uso de agua para apagar estos incendios está estrictamente prohibido, ya que provoca una reacción explosiva, esparciendo el aceite ardiente por toda el área. Para este tipo de incendio, se utilizan extintores especiales de clase K que contienen agentes húmedos capaces de sofocar el fuego y reducir la temperatura del aceite de manera segura.

¿Qué es un incendio químico?

¿Qué es un incendio químico?

Es el tipo de fuego D, que involucra productos químicos como agentes reactivos, combustibles o catalizadores. A diferencia de los incendios convencionales, los de tipo químico pueden implicar reacciones violentas, la liberación de vapores tóxicos, o la formación de compuestos peligrosos como resultado de la combustión. Los incendios químicos requieren una respuesta especializada debido a la complejidad de sus reacciones y los riesgos adicionales que suponen.

Características que definen un incendio químico:

  • Reacciones exotérmicas: liberación de calor significativo durante la combustión o al entrar en contacto con otras sustancias.

  • Liberación de gases tóxicos: emisión de productos peligrosos como dióxido de carbono, vapores ácidos o gases inflamables.

  • Interacción con el agua: reacciones violentas que pueden empeorar el incendio al entrar en contacto con agua o humedad.

  • Propagación rápida: capacidad de expandirse con rapidez debido a la naturaleza reactiva de los compuestos involucrados.

  • Daños ambientales: posibles impactos negativos en el medio ambiente debido a la contaminación por productos de la combustión.

  • Dificultad en la extinción: necesidad de usar métodos especializados para garantizar su extinción, como espumas químicas o sistemas de extinción con CO₂, en lugar de agua.

Riesgos asociados al manejo de productos químicos

Riesgos asociados al manejo de productos químicos

El manejo de productos químicos, como la soda cáustica, es una actividad inherente a diversas industrias, pero también está asociado con numerosos peligros que pueden poner en peligro la salud de los trabajadores, la seguridad del entorno y la integridad de las instalaciones, como:

  • Exposición a sustancias corrosivas: el contacto directo con productos como la soda cáustica, ácidos fuertes o bases concentradas puede causar quemaduras graves en la piel, ojos o vías respiratorias. Estos compuestos tienen la capacidad de destruir tejidos orgánicos y, si no se manejan correctamente, pueden generar daños permanentes o incluso poner en riesgo la vida de las personas.
  • Inhalación de vapores tóxicos o irritantes: muchos productos químicos emiten vapores que son perjudiciales para la salud al ser inhalados. Compuestos como amoníaco, peróxido de hidrógeno, cloruro de hidrógeno o dióxido de azufre, entre otros, pueden causar irritación en las vías respiratorias, asfixia, y en exposiciones prolongadas, daño pulmonar irreversible.
  • Reacciones violentas y explosiones: algunos químicos son reactivos y pueden ocasionar reacciones violentas si entran en contacto con agua, aire u otros reactivos. Esto es especialmente cierto en el caso de metales combustibles, como sodio o litio, que reaccionan violentamente con agua, o en mezclas de compuestos orgánicos e inorgánicos que pueden generar calor extremo, liberación de gases tóxicos o incluso explosiones.
  • Contaminación del entorno: los derrames o liberación accidental de productos químicos pueden contaminar el suelo, agua y aire, afectando la biodiversidad y los recursos naturales. La correcta gestión de residuos peligrosos y el control de derrames son esenciales para evitar la propagación de sustancias contaminantes y reducir el impacto ambiental.
  • Daños a la infraestructura: los químicos corrosivos o reactivos pueden deteriorar los equipos, instalaciones y sistemas de seguridad si no se manejan adecuadamente. El contacto prolongado con materiales metálicos o plásticos puede causar corrosión, desgastes, obstrucción de tuberías o incluso fallas en el sistema de contención.
  • Riesgo de intoxicación crónica o exposición a largo plazo: el contacto repetido o prolongado con productos químicos peligrosos puede tener efectos adversos sobre la salud, como cáncer, daño hepático o renal, trastornos neurológicos, alteraciones endocrinas, entre otros. Por ello, es vital usar los productos bajo condiciones controladas y contar con un monitoreo constante de la salud de los trabajadores expuestos.
  • Deficiencias en la seguridad del equipo de protección personal (EPP): la falta de equipo de protección adecuado o su uso incorrecto puede generar situaciones peligrosas. Por ejemplo, guantes de baja calidad, gafas inadecuadas o respiradores defectuosos pueden no proporcionar la barrera suficiente frente a productos tóxicos y corrosivos, lo que aumenta los riesgos para los operarios.

¿Por qué es clave capacitarse en prevención de incendios?

¿Por qué es clave capacitarse en prevención de incendios?

Los trabajadores capacitados son la primera línea de defensa frente a emergencias. Una respuesta adecuada por parte de aquellos que saben qué hacer en caso de incendio permite:

  • Brindar una solución rápida y efectiva: los operarios entrenados pueden identificar los riesgos y actuar rápidamente para contener el incendio, evitando que se propague.

  • Minimizar los daños materiales y humanos: una intervención adecuada limita los daños a la infraestructura, el equipo y las personas involucradas en el incidente.

  • Cumplimiento con normativas de seguridad: las normativas exigen que el personal esté capacitado en prevención y manejo de emergencias con productos químicos en Colombia, esto asegura el cumplimiento legal.

  • Reducir los futuros costos operativos: la capacitación ayuda a prevenir accidentes graves que podrían resultar en altos costos por daños a la propiedad, pérdidas de producción o compensaciones.

  • Mejorar la cultura de seguridad: la formación constante fomenta una cultura de prevención dentro de la empresa, donde todos los trabajadores participan activamente en la protección y seguridad.

Recomendaciones clave para prevenir incendios químicos

Recomendaciones clave para prevenir incendios químicos

La prevención no solo depende de contar con procedimientos adecuados, sino también de crear un ambiente de trabajo controlado y seguro. A continuación compartimos algunas medidas preventivas efectivas que podrían ser de utilidad para minimizar los riesgos y proteger tanto a las personas como las instalaciones:

  • Almacenamiento adecuado de productos químicos

Es esencial almacenar los productos químicos de acuerdo con sus características, siguiendo las normativas que especifican las condiciones de temperatura, humedad y ventilación. Los químicos reactivos deben ser almacenados en contenedores compatibles, lejos de fuentes de calor, llamas o productos incompatibles, como el agua en el caso de metales reactivos. Además, se deben utilizar sistemas de almacenamiento que eviten el derrame o la mezcla accidental de sustancias peligrosas.

  • Etiquetado claro y actualizado

Todos los productos químicos deben estar correctamente etiquetados de acuerdo con el Sistema Globalmente Armonizado (SGA). Las etiquetas deben incluir información sobre los peligros, instrucciones de manejo seguro y medidas a tomar en caso de emergencia. Esta identificación debe ser legible y mantenerse actualizada, incluso en el caso de reenvases o cambios en el envase original.

  • Mantenimiento regular de equipos y sistemas de protección

Los sistemas de protección como rociadores, extintores, sistemas de ventilación y alarmas contra incendios deben recibir mantenimiento regular para garantizar su funcionamiento óptimo. Las inspecciones periódicas deben incluir la revisión de equipos de seguridad como las mangueras de emergencia, los sistemas de rociadores automáticos y las cubiertas de protección contra explosiones. De esta manera, se asegura que los equipos estén operativos en caso de un incendio por productos químicos​​ real.

  • Control y monitoreo de fuentes de ignición

En zonas donde se manipulan productos químicos, se debe implementar un control estricto sobre las fuentes de ignición. Las instalaciones deben contar con sistemas de monitoreo que detecten cualquier anomalía en las condiciones ambientales, como la presencia de gases inflamables o el aumento de temperaturas en áreas críticas. Además, el uso de herramientas eléctricas o equipos que generen chispas debe ser restringido a zonas específicas, adecuadamente protegidas.

  • Control de residuos y desechos químicos 

Los residuos peligrosos deben ser manejados adecuadamente para evitar la acumulación de materiales combustibles o reactivos. Se recomienda implementar un sistema de recolección y almacenamiento de residuos químicos que minimice el riesgo de incendio. Además, los residuos deben ser eliminados de acuerdo con las normativas ambientales y de seguridad, evitando que se acumulen en áreas de alto riesgo.

Equipos de protección personal (EPP) necesarios

Equipos de protección personal (EPP) necesarios

En un incendio químico, el uso adecuado de equipos de protección personal es crucial para proteger la salud de los operarios y evitar lesiones graves. Los EPP deben ser seleccionados según el tipo de producto químico y el nivel de riesgo, y suelen incluir:

  • Guantes resistentes a productos químicos: deben ser de materiales como nitrilo, neopreno o PVC, que ofrecen resistencia a sustancias corrosivas. Es importante que se ajusten bien y se cambien si están dañados.

  • Gafas de seguridad o careta facial: deben ser de protección hermética o caretas completas para proteger los ojos de salpicaduras o vapores tóxicos. Las caretas faciales proporcionan protección adicional para la cara.

  • Ropa de protección química: el uso de trajes especiales hechos de materiales resistentes a productos químicos, como Tychem o PVC, es esencial para evitar el contacto directo con sustancias peligrosas.

  • Botas de seguridad impermeables: el calzado debe ser de suela antideslizante y estar hechas de materiales resistentes a productos químicos. Además, deben cubrir completamente los pies y tobillos.

  • Respiradores o mascarillas: en áreas con riesgo de inhalación de vapores químicos, es esencial usar respiradores con filtros adecuados para sustancias específicas. Este EPP protege las vías respiratorias de gases tóxicos.

Capacitación y prevención: el camino hacia la seguridad

La capacitación continua es fundamental para enfrentar incendios causados por químicos de manera efectiva. En Amoquímicos, ofrecemos cursos certificados y capacitaciones en productos químicos que preparan a su personal para prevenir y manejar emergencias de tipo D, cumpliendo con las normativas de seguridad y minimizando riesgos.

La prevención es clave para garantizar la seguridad en el manejo de estos materiales. Capacítese con nosotros y proteja a su equipo y a su empresa de la mano de expertos en la venta de productos químicos como nosotros. 

Artículo tomado de Amoquímicos Colombia S.A.S.

martes, 1 de julio de 2025

¿Cómo atender emergencias en zonas donde se manipula la soda - soda cáustica?

Atender emergencias con soda cáustica requiere enjuague inmediato con agua y uso de protección personal. Descubra los protocolos para actuar rápido.

¿Qué hacer si me cae soda cáustica en la piel? ¿Qué pasa si un operario sufre contacto directo con este compuesto? ¿Qué elementos de protección son realmente eficaces frente a un producto tan corrosivo? Estas son preguntas que toda industria debería poder responder con claridad antes de introducir hidróxido de sodio en sus procesos.

La soda cáustica es una sustancia indispensable en sectores como el tratamiento de aguas, la producción de papel, la industria alimentaria y la fabricación de productos de limpieza. Sin embargo, su alta reactividad y peligrosidad hacen que cualquier incidente asociado a su uso pueda escalar rápidamente si no se cuenta con protocolos adecuados, personal capacitado y medidas preventivas. 

En este artículo de Amoquímicos, abordamos con rigor técnico qué hacer en caso de emergencias con soda cáustica, qué normativas aplican en Colombia y cómo garantizar una manipulación segura y responsable en cualquier entorno industrial. ¡No deje de leer!

¿Qué hacer en caso de derrame de soda cáustica?

La soda cáustica (hidróxido de sodio) es un agente altamente corrosivo que, al entrar en contacto con superficies, personas o el medio ambiente, puede generar reacciones violentas y daños significativos. Por ello, ante un derrame, es esencial:

  • Aislar la zona y activar el protocolo interno de emergencia: cierre inmediato del área afectada para evitar el ingreso de personas no autorizadas. Señalice la zona con cintas de advertencia y active el plan de respuesta a emergencias químicas. Esta primera acción es crucial para contener el riesgo y evitar una propagación del químico o de los vapores cáusticos.

  • Usar el equipo de protección personal adecuado (EPP): el personal encargado debe portar guantes de nitrilo o neopreno, gafas de seguridad, protector facial, botas de caucho y traje químico impermeable. Este EPP protege frente a quemaduras por soda cáustica, inhalación de vapores y reacciones cutáneas. Bajo ninguna circunstancia debe permitirse el ingreso sin este equipo.

  • Controlar el derrame sin agregar agua: nunca debe emplearse agua para contener la soda cáustica, ya que su reacción exotérmica con líquidos puede generar vapores peligrosos y salpicaduras violentas. En su lugar, utilice absorbentes inertes como tierra seca, vermiculita o material absorbente específico para químicos corrosivos.

  • Neutralizar con soluciones ácidas suaves (si aplica): una vez contenido el derrame y bajo supervisión experta, puede aplicarse una solución de ácido acético diluido (vinagre blanco industrial) o ácido cítrico, para neutralizar el pH. Este procedimiento lo debe realizar únicamente un experto que sepa cómo neutralizar la soda cáustica con extremo cuidado, monitoreando en todo momento la reacción y ventilando adecuadamente la zona.

  • Recolectar y disponer el residuo como material peligroso: el material absorbente impregnado con soda cáustica debe colocarse en bolsas o contenedores plásticos resistentes, etiquetados según el Sistema Globalmente Armonizado (SGA). La disposición debe realizarse a través de un gestor autorizado por la autoridad ambiental competente (como la ANLA o el IDEAM en Colombia).

  • Ventilar la zona y limpiar con agua en cantidades controladas: después de que se haya retirado todo el material residual y neutralizado el pH, se puede proceder a un lavado controlado de la zona, empleando agua en pequeñas cantidades y bajo supervisión. Se recomienda usar paños absorbentes y luego verificar que no haya restos corrosivos.

  • Documentar el incidente y reportarlo si es necesario: todo derrame debe registrarse en el sistema de seguridad industrial de la empresa, incluyendo hora, volumen estimado, personas expuestas, acciones tomadas y medidas correctivas. Si la cantidad derramada supera lo permitido por ley, debe reportarse a la autoridad ambiental local.

Primeros auxilios en exposición a soda cáustica

Primeros auxilios en exposición a soda cáustica

El contacto con soda cáustica puede causar daños graves a la piel, los ojos, el sistema respiratorio y el tracto digestivo, dependiendo de la vía de exposición. Por esta razón, es fundamental que el personal que manipula este reactivo conozca y aplique correctamente las siguientes medidas de primeros auxilios:

  • Contacto con la piel: retire de inmediato la ropa contaminada sin tocar las áreas afectadas con las manos descubiertas. Lave la piel con abundante agua a temperatura ambiente durante al menos 20 minutos, sin frotar. No aplique cremas, ungüentos ni neutralizantes, pues podrían agravar la lesión. Después del lavado, cubra con gasa estéril y busque atención médica especializada.

  • Contacto con los ojos: abra los párpados con suavidad y enjuague ambos ojos con solución salina estéril o abundante agua durante mínimo 20 minutos continuos. Es indispensable mantener el flujo constante y evitar la presión directa. La víctima debe ser evaluada por un oftalmólogo lo antes posible, incluso si el dolor disminuye, ya que los daños oculares por álcalis pueden evolucionar con el tiempo.

  • Inhalación de vapores: traslade a la persona afectada a un lugar con aire fresco de inmediato. Si presenta dificultad respiratoria, administre oxígeno si está disponible y cuente con personal capacitado. En casos severos de exposición, se debe activar el protocolo de traslado urgente a un centro médico con capacidad para atención respiratoria avanzada.

  • Ingestión accidental: no induzca el vómito. Ofrezca agua en pequeñas cantidades para diluir el producto, si la persona está consciente y puede tragar sin dificultad. Evite el uso de neutralizantes sin supervisión médica. Se recomienda el traslado inmediato a un centro hospitalario, llevando el rótulo o ficha técnica del producto para orientar el tratamiento clínico.

  • Exposición prolongada o sin síntomas inmediatos: aunque algunas reacciones pueden no presentarse de forma inmediata, toda exposición a soda cáustica debe ser evaluada por personal médico. La gravedad de la lesión puede manifestarse horas después, especialmente en ojos, mucosas o tracto digestivo.

Importante: todas estas medidas deben ser parte de un protocolo de seguridad institucional, acompañado por capacitación continua y acceso inmediato a kits de emergencia. No sustituye la atención médica profesional, que es obligatoria en todos los casos.

Importancia de la capacitación en manejo químico

Importancia de la capacitación en manejo químico

La manipulación de sustancias químicas peligrosas, como la soda cáustica, requiere mucho más que intuición o experiencia empírica. La capacitación técnica periódica es un pilar esencial para garantizar la seguridad del personal, prevenir accidentes y asegurar el cumplimiento normativo. Las empresas responsables deben priorizar estos procesos como parte integral de su cultura HSEQ, por diversas razones como:

  • Reducción del riesgo de accidentes: un trabajador capacitado comprende los riesgos del producto que manipula, sabe interpretar las etiquetas, fichas de datos de seguridad (FDS) y conoce los procedimientos ante incidentes. Esto disminuye significativamente la probabilidad de quemaduras, intoxicaciones o exposiciones no controladas.

  • Mayor eficacia en la respuesta ante emergencias: la formación práctica permite que el personal actúe con rapidez y precisión frente a derrames, salpicaduras o inhalaciones accidentales. Saber cómo contener un producto, evacuar una zona o aplicar primeros auxilios correctamente puede marcar la diferencia entre un incidente menor y una tragedia.

  • Cumplimiento legal y normativo: en Colombia, entidades como el Ministerio de Trabajo, el Ministerio de Salud y la ANDI promueven programas de capacitación obligatoria sobre seguridad química. La Resolución 0312 de 2019 exige a los empleadores garantizar la formación en riesgos químicos para todos los trabajadores expuestos.

  • Mejora de la cultura de seguridad en la empresa: la capacitación continua promueve la conciencia sobre los peligros del entorno laboral y refuerza el sentido de responsabilidad compartida. Esto genera ambientes de trabajo más seguros, colaborativos y preventivos.

  • Protección del entorno y del equipo: un error en la manipulación de soda cáustica no solo puede afectar al operario, sino también comprometer la integridad de otros colaboradores, equipos de producción, instalaciones e incluso el medio ambiente. La capacitación permite prever escenarios de riesgo y evitar daños colaterales costosos.

  • Actualización frente a nuevas normativas y tecnologías: el sector químico está en constante evolución. Estar al día en protocolos de seguridad, nuevas formulaciones o cambios en el etiquetado GHS es fundamental para mantener la operación dentro de los estándares internacionales y nacionales de seguridad.

Equipos de protección personal para manipular soda cáustica

Equipos de protección personal para manipular soda cáustica

El uso adecuado de equipos de protección personal (EPP) es una barrera imprescindible para salvaguardar la salud de los operarios. A continuación detallamos los elementos mínimos requeridos para una manipulación segura y responsable:

  • Guantes resistentes a productos químicos

Los guantes deben ser específicamente diseñados para resistir sustancias corrosivas. Se recomienda el uso de guantes de nitrilo, neopreno o PVC, materiales que ofrecen buena resistencia química sin comprometer la destreza manual. Es importante verificar que los guantes estén libres de perforaciones, se ajusten correctamente a la mano y se cambien frecuentemente, especialmente tras contacto directo con el producto.

  • Gafas de seguridad o protector facial

La protección ocular es crítica, ya que una salpicadura de soda cáustica puede causar lesiones irreversibles. Se recomienda el uso de gafas herméticas tipo monogafa, preferiblemente con ventilación indirecta, o caretas faciales completas que protejan tanto los ojos como el rostro. Estos elementos deben cumplir con estándares ANSI Z87.1 o equivalentes, garantizando un alto nivel de protección ante salpicaduras.

  • Ropa de protección química

La vestimenta debe impedir el contacto directo con la piel. Se aconseja el uso de overoles o delantales impermeables fabricados en materiales como PVC, Tychem® o similares. En zonas de alto riesgo, también se recomienda ropa de manga larga con puños ajustados, botas con puntera de seguridad y capuchas integradas. La ropa debe estar en buen estado y ser reemplazada al menor signo de deterioro.

  • Calzado de seguridad con resistencia química

Los zapatos o botas deben ser de suela antideslizante y estar fabricados con materiales resistentes a sustancias cáusticas. Se recomienda el uso de botas de goma con refuerzo en la puntera, que cubran hasta por debajo de la rodilla, en especial en operaciones donde existe riesgo de derrame.

  • Protección respiratoria (según nivel de exposición)

En ambientes con presencia de vapores de soda cáustica o polvo generado por su forma sólida, se deben utilizar mascarillas con filtros adecuados (P100 o equivalente) o respiradores de cartucho con protección específica para gases alcalinos. Este EPP se vuelve indispensable en espacios cerrados, con poca ventilación o durante limpiezas profundas.

Normativas de seguridad química aplicables

Normativas de seguridad química aplicables

El país cuenta con un marco normativo robusto que regula la manipulación, almacenamiento, transporte y disposición de productos químicos, con el fin de proteger la salud de los trabajadores, el entorno y la seguridad pública. Conozca algunas de estas reglas a continuación:

  • Decreto 1072 de 2015

Este decreto compila las normas reglamentarias del sector trabajo, incluyendo las disposiciones sobre la identificación de peligros y evaluación de riesgos químicos. Obliga a todas las empresas a implementar procedimientos para la manipulación segura de productos como el hidróxido de sodio, además de contemplar capacitaciones periódicas y provisión de EPP.

  • Resolución 0772 de 2021

La Resolución 0772 establece la obligatoriedad de aplicar el Sistema Globalmente Armonizado (SGA) de clasificación y etiquetado de productos químicos peligrosos. En la venta de soda cáustica, esta debe contar con su respectiva Hoja de Datos de Seguridad (HDS/SDS), etiqueta normalizada y pictogramas que adviertan sobre sus riesgos. Esta resolución aplica a todos los actores de la cadena: productores, distribuidores y usuarios industriales.

  • Decreto 1609 de 2002

Este decreto reglamenta el transporte terrestre de sustancias peligrosas, incluyendo el hidróxido de sodio en estado sólido o líquido. Establece los requerimientos de rotulación, embalaje, documentación, señalización vehicular, así como la capacitación del personal involucrado en el proceso de movilización.

  • Norma Técnica Colombiana NTC 4435

Esta regla técnica específica establece los requisitos mínimos para el almacenamiento seguro de productos químicos peligrosos, con lineamientos sobre segregación por clases de peligrosidad, ventilación, señalización, contención de derrames y control de accesos. En el caso de la soda cáustica, se exige almacenamiento en áreas secas, bien ventiladas, con materiales compatibles y sistemas de contención secundaria.

Adquiera este químico únicamente con expertos como Amoquímicos

La soda cáustica es un insumo químico esencial para múltiples industrias, pero también representa uno de los compuestos más peligrosos si no se manipula bajo estrictos estándares de seguridad. Por esta razón, adquirirlo únicamente con distribuidores especializados no es una opción, sino una exigencia para garantizar el cumplimiento normativo, la seguridad operativa y la calidad del producto.

En Amoquímicos Colombia S.A.S. contamos con más de 35 años de experiencia en la venta de productos químicos como el hidróxido de sodio. Nuestra trayectoria, sumada a un equipo técnico experto y a procesos logísticos seguros, nos posiciona como un aliado estratégico para industrias que valoran el respaldo, la trazabilidad y el cumplimiento legal en el suministro de sustancias químicas.

Ofrecemos soda cáustica en diferentes presentaciones (líquida y en escamas), con documentación técnica completa (HDS actualizada, ficha técnica y certificado de análisis), atención personalizada y asesoría integral sobre almacenamiento, transporte y manejo seguro. Además, cumplimos con toda la normatividad vigente en Colombia, incluida la implementación del SGA.

Confíe en Amoquímicos. Porque más allá de entregar un producto químico en Colombia, acompañamos cada proceso con conocimiento, responsabilidad y soporte técnico permanente. Si su industria requiere soda cáustica, adquiérala con quienes realmente saben manejarla.

Artículo tomado de Amoquímicos Colombia S.A.S.